Si te sientes solo y tu soledad te duele
no preguntes a los otros porqué te abandonaron.
Pregúntate a ti mismo a quién ofreces
tu compañía, tu amistad, tu cercanía...
No corras tras los otros
para encontrarlos, atraparlos y tenerlos;
sal al encuentro con actitud de entrega
y déjate encontrar.
Porque en el país del amor
recibe más el que ofrece que el que pide.
Y pregúntate a ti mismo porqué te dejas solo.
Porque la soledad más cruel y dolorosa
no la sufres cuando estás sin los otros
sino cuando no te encuentras contigo mismo.
miércoles, 20 de febrero de 2013
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario